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La longevidad en Italia: un fenómeno en crecimiento
En los últimos años, Italia ha registrado un aumento significativo en el número de personas centenarias, con más de 22.500 personas que han alcanzado esta edad extraordinaria. Este fenómeno va acompañado de un aumento del 30% en comparación con hace diez años, lo que pone de relieve no solo la calidad de vida, sino también la importancia de una planificación adecuada de las pensiones.
Las mujeres representan el 83% de esta población, un hecho que subraya aún más la «brecha de género» en términos
de longevidad.
El papel de la planificación de las pensiones
La planificación de la jubilación es esencial para garantizar un nivel de vida digno incluso después de jubilarse del trabajo.
Según Moneyfarm, es fundamental empezar a planificar su futuro financiero lo antes posible. Con el aumento de la esperanza de vida, es esencial integrar el subsidio de pensión pública con formas de pensión complementaria. Este enfoque no solo ofrece seguridad económica, sino que también permite hacer frente a cualquier imprevisto sin ansiedad
.
Los desafíos para los trabajadores autónomos
La situación es particularmente crítica para los trabajadores autónomos, que pueden contar con una tasa de reemplazo mucho más baja que la de los empleados. Con unos ingresos netos de 2.000 euros al mes, un trabajador autónomo solo podría recibir 860 euros de pensión, por lo que sería necesario un suplemento mensual importante.
Este escenario destaca la importancia de una planificación de la jubilación específica, que puede garantizar un futuro tranquilo incluso para quienes no tienen un empleador que contribuya al fondo de pensiones
.
Las regiones más longevas y las disparidades territoriales
Otro aspecto interesante se refiere a las disparidades territoriales en términos de longevidad. Las regiones con la mayor concentración de personas centenarias son Liguria, Molise y Friuli Venezia-Giulia. Además, los datos del ISTAT muestran que las provincias nororientales y centrales tienen una mayor esperanza de vida al nacer.
Este fenómeno está influenciado por varios factores, incluido el acceso a los servicios de salud y la calidad del
medio ambiente.
La brecha de género en la longevidad
Por último, es importante tener en cuenta que las mujeres tienden a vivir más que los hombres, con una diferencia de unos cuatro años. Las niñas nacidas en provincias como Trento pueden esperar vivir hasta 86,9 años, mientras que las de las regiones del sur tienen una esperanza de vida significativamente más baja. Esta disparidad pone de relieve la necesidad de políticas de salud pública que puedan abordar las diferencias regionales y
de género.
