Rendimiento de la Bolsa de Valores de Hong Kong
La última sesión de noviembre supuso un soplo de positividad para los mercados bursátiles chinos, en particular para la Bolsa de Hong Kong, que cerró con un aumento del 0,29% en el índice Hang Seng.
Este resultado se vio impulsado por un salto significativo en el sector tecnológico, que registró un aumento de más de un punto porcentual. Sin embargo, es importante señalar que el balance mensual de Hong Kong sigue siendo negativo, con un descenso del 4,4%.
Esta caída refleja las persistentes incertidumbres con respecto a la recuperación económica de China y las expectativas sobre las medidas de estímulo que podrían provenir
de Beijing.
Rendimiento de la Bolsa de Valores de Shanghai
La Bolsa de Valores de Shanghai también registró un cierre positivo, con un aumento del 0,9% en la última sesión de noviembre.
El mes finalizó con un ligero aumento del 1,5%, gracias principalmente a la fuerte recuperación de la primera semana, aunque se absorbió rápidamente. Desde enero, el índice compuesto de Shanghai ha registrado un crecimiento de alrededor del 15%, una señal de cierta resiliencia a pesar de los desafíos económicos
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El impacto del PIB y la inflación suizos en la eurozona
Al mismo tiempo, el producto interno bruto (PIB) de Suiza creció un 0,2% en el tercer trimestre, lo que representa una desaceleración en comparación con el trimestre anterior.
El Ministerio de Economía ha confirmado que este descenso se debe a una disminución del consumo de los hogares y de la inversión en construcción, así como a la desaceleración del sector químico-farmacéutico. Además, hoy se espera la cifra de inflación de la eurozona, que está bajo la lupa del Banco Central Europeo (BCE).
El aumento de la inflación en Francia hasta el 1,7% fue inferior al esperado y se mantuvo muy por debajo del objetivo del 2% establecido por el
BCE.
En resumen, si bien los mercados bursátiles chinos muestran signos de recuperación, las incertidumbres económicas siguen lastrando las perspectivas futuras. Los inversores deberán seguir de cerca la evolución económica y las políticas monetarias para afrontar este complejo entorno
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