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Introducción a las fluctuaciones bursátiles
El panorama bursátil estadounidense presenta actualmente dinámicas divergentes, lo que pone de relieve un contexto de incertidumbres y oportunidades. Mientras que el Dow Jones y el S&P 500 muestran un ligero crecimiento, el Nasdaq registró una caída significativa.
Este escenario pone de relieve los desafíos a los que se enfrentan las empresas de tecnología, ya que títulos como Comcast, Microsoft y Nvidia sufren pérdidas significativas
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Rendimiento de los principales índices bursátiles
En la apertura de los mercados, el Dow Jones subió 70,30 puntos, lo que corresponde a un aumento del 0,16%.
El S&P 500 también registró un aumento, sumando 8,61 puntos, lo que equivale a un aumento del 0,14%. Sin embargo, el Nasdaq se encuentra en territorio negativo, perdiendo 36,81 puntos, o un 0,19%. Estas fluctuaciones ponen de relieve la vulnerabilidad del sector tecnológico, que sigue influenciado por factores macroeconómicos y por
la creciente presión competitiva.
Análisis del crecimiento económico en los Estados Unidos
Según datos preliminares de la Oficina de Análisis Económico, la economía de los Estados Unidos experimentó un crecimiento inferior al esperado en el cuarto trimestre de 2024, con un aumento del PIB del 2,3%.
Esta cifra es inferior al 3,1% del trimestre anterior y al 2,7% esperado por los analistas. A pesar de la aceleración del consumo, la inflación alcanzó el 2,3%, lo que generó preocupación por un posible estancamiento económico.
Empresas, como United Parcel Service (UPS), ya están planificando importantes reducciones de volumen y renovaciones para hacer frente a los desafíos futuros.
Perspectivas para la zona euro y las empresas energéticas
En Europa, se espera que el crecimiento del PIB de la zona euro en el cuarto trimestre de 2024 se desacelere, con un aumento del 0,9% interanual, por debajo de las expectativas de los analistas.
La variación trimestral se estima en cero, frente al +0,1% esperado. Las empresas de energía, como Shell, también tienen dificultades, pues han registrado una caída del 78% en sus beneficios en el cuarto trimestre. Sin embargo, Shell mantuvo un sólido desempeño financiero general durante el año, con una generación de caja superior a 2023 y una reducción significativa de los costos estructurales, anunciando un aumento de los dividendos y un nuevo programa de recompra de 3 500 millones de dólares
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