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La herencia de las familias italianas: un marco en evolución
En las últimas décadas, las familias italianas han acumulado una riqueza significativa, que se ha triplicado desde 1990, pasando de 1.975 mil millones de euros a 5.692 millones en 2023.
Sin embargo, este aumento va acompañado de una caída de la tasa de ahorro, que pasó del 28% en la década de 1980 al 8,4% previsto para 2024. Este escenario pone de relieve una contradicción: a medida que la riqueza crece, la capacidad de ahorrar disminuye, lo que sugiere un cambio en el comportamiento del consumo y la inversión
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El Foro AIPB: un análisis de los desafíos actuales
El vigésimo foro de la AIPB, titulado «Banca privada para el crecimiento», tendrá lugar en Milán el 21 de noviembre. Este evento representa una importante oportunidad para debatir los desafíos y las oportunidades de la banca privada en Italia.
Según las encuestas, la capacidad de las familias para generar nueva riqueza ha disminuido, con flujos acumulados que pasaron de 1.746 mil millones de euros entre 1996 y 2009 a solo 950 mil millones en los años siguientes. Esta tendencia preocupa a los expertos del sector, que ven la necesidad de un cambio radical en el enfoque de la gestión de activos
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Inversiones y asignación de patrimonio
Un análisis detallado de la riqueza italiana revela que una gran parte se concentra en bienes inmuebles (51%) y en efectivo (40%). Sin embargo, solo el 10% se invierte en acciones, lo que pone de manifiesto un preocupante desequilibrio.
Las oportunidades que ofrecen los mercados privados se han ignorado en gran medida, lo que ha limitado aún más el potencial de crecimiento. Los líderes de la banca privada sugieren tres áreas clave para optimizar el crecimiento de la riqueza: reducir la liquidez, diversificar las inversiones y ampliar el horizonte temporal de inversión
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El papel de la banca privada en el crecimiento económico
La banca privada no se limita a la gestión de activos, sino que actúa como catalizador del crecimiento económico. Apoya a las pequeñas y medianas empresas (pymes) italianas, mejorando su capacidad de inversión y garantizando la competitividad y la resiliencia. Los datos muestran que el 23% de los clientes de la banca privada son empresarios que utilizan estos servicios para analizar las estrategias de crecimiento y la gestión de sus empresas. Este vínculo entre la banca privada y el desarrollo económico es crucial para el futuro de Italia.
Perspectivas futuras de la banca privada
Las previsiones para 2024 indican un aumento de los activos gestionados en la banca privada, que alcanzarán los 1.242 millones de euros, lo que supone un aumento del 12,8% en comparación con el año anterior. Este resultado es atribuible a las importantes entradas netas y a la entrada de nuevos actores en el mercado. El desafío para el sector consistirá en aumentar las inversiones en acciones y mercados privados, para aprovechar las oportunidades que no están disponibles en los mercados tradicionales. Solo de esta manera la banca privada podrá seguir desempeñando un papel fundamental en el crecimiento económico italiano
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