El bono de renovación es un incentivo fiscal introducido por el gobierno italiano para promover la mejora energética de los edificios y la seguridad de los hogares. Gracias a esta bonificación, es posible obtener una devolución de impuestos del 50% de los gastos incurridos en la renovación de edificios, hasta un máximo de 96.000 euros por unidad inmobiliaria.
Sin embargo, muchos ciudadanos no saben cómo solicitar la bonificación de reestructuración ni qué documentos presentar. En este artículo, proporcionaremos toda la información que necesita para comprender cómo funciona la bonificación y le explicaremos paso a paso
cómo solicitarla.
Índice de contenido:
¿Cómo funciona el bono de reestructuración?
La bonificación por renovación es un incentivo fiscal que prevé el reembolso del 50% de los gastos incurridos en la renovación de edificios. El beneficio está destinado tanto a los propietarios como a los inquilinos, siempre que hayan sido autorizados por el propietario para llevar a cabo las intervenciones.
Es posible solicitar la bonificación para la renovación de unidades inmobiliarias de uso residencial, pero también para edificios con un propósito diferente, como oficinas o tiendas, siempre que no sean propiedades de lujo. Además, el beneficio también se puede solicitar para intervenciones destinadas a reducir el riesgo sísmico y asegurar los edificios.
Para poder aprovechar la bonificación de renovación, es necesario que las intervenciones realizadas cumplan con la normativa técnica y urbanística vigente. Además, se debe prestar especial atención a la elección de la empresa que realizará la obra: debe estar inscrita periódicamente en el Registro de Empresas Constructoras de la Cámara de Comercio y tener las habilidades técnicas y profesionales necesarias.
Para solicitar la bonificación, es necesario presentar la documentación relativa a los gastos incurridos y las facturas emitidas por la empresa que realizó
la obra.
¿Cuál es el importe máximo de la prima de reestructuración?
El importe máximo de la bonificación de reestructuración es de 96.000 euros por unidad inmobiliaria. Esta cantidad corresponde al 50% de los gastos incurridos por la renovación de edificios, hasta un máximo de 192 000 euros. Sin embargo, este límite máximo puede aumentarse en algunos casos específicos: por ejemplo, en el caso de intervenciones destinadas a reducir el riesgo sísmico y proteger los edificios, el límite máximo puede aumentarse hasta
136.000 euros.
Es importante recordar que la desgravación fiscal se concede en forma de crédito fiscal, es decir, en forma de devolución de impuestos que se puede utilizar para compensar los impuestos adeudados en los años fiscales posteriores. Además, la bonificación de reestructuración es compatible con otras exenciones fiscales previstas por la ley, como la bonificación a los muebles o la deducción fiscal del 65% por la
mejora energética.
¿Quién puede solicitar la prima de reestructuración?
Todos los contribuyentes que sufraguen los gastos de renovación de edificios pueden solicitar la bonificación de renovación. En particular, los propietarios de propiedades de uso residencial pueden aprovechar la desgravación fiscal, pero también los inquilinos que hayan obtenido la autorización del propietario para llevar a cabo las intervenciones
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Además, los condominios y las empresas cooperativas que realicen intervenciones de mejora energética en edificios donde hay unidades inmobiliarias de uso residencial también pueden solicitar el bono de renovación.
Sin embargo, para aprovechar la ventaja fiscal, es necesario cumplir con ciertas condiciones y requisitos establecidos por la ley. En particular, las renovaciones de edificios deben cumplir con la normativa técnica y urbanística vigente y deben ser realizadas por empresas inscritas periódicamente en el Registro de Empresas Constructoras de la Cámara de Comercio
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Además, es importante tener en cuenta que la bonificación por renovación no se puede combinar con otras exenciones fiscales para las mismas intervenciones en el edificio.
¿Qué documentación se necesita para solicitar la bonificación de reestructuración?
Para solicitar la bonificación de reestructuración, es necesario presentar la documentación relativa a los gastos incurridos y las facturas emitidas por la empresa que realizó la obra. En particular, es necesario proporcionar una serie de documentos que acrediten la ejecución exitosa de las intervenciones de renovación del edificio y
los gastos relacionados incurridos.
Entre los documentos necesarios para solicitar la bonificación de reestructuración encontramos: la declaración de impuestos del año en que se incurrió en los gastos, el recibo o factura de la empresa que realizó la obra, el certificado de viabilidad o el permiso de construcción, si las intervenciones realizadas lo requieren.
Además, es necesario conservar toda la documentación relativa al gasto realizado durante al menos 10 años, ya que la Agencia Tributaria puede solicitarla para posibles controles.
Por último, es importante tener en cuenta que la documentación debe estar correctamente recopilada y redactada de forma clara y exhaustiva, a fin de evitar problemas a la hora de solicitar la bonificación de reestructuración.
Cómo solicitar la bonificación de reestructuración: instrucciones paso a paso.
Para solicitar la bonificación de reestructuración, es necesario enviar la documentación a la Agencia Tributaria a través del formulario de solicitud F24, disponible en el sitio web de la agencia. Además, es posible utilizar el servicio electrónico «Entratel» o «Fisconline» para enviar la solicitud directamente en línea.
El primer paso para solicitar la bonificación de renovación es llevar a cabo las reformas del edificio y conservar toda la documentación relativa a los gastos incurridos. A continuación, debe rellenar el formulario F24, indicando el importe de los gastos incurridos y el crédito fiscal solicitado
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Una vez que se haya completado el modelo F24, debe enviarse a la Agencia Tributaria mediante uno de los siguientes métodos: entregándolo directamente en los mostradores de la agencia, enviándolo por correo certificado con acuse de recibo o mediante los servicios electrónicos mencionados anteriormente.
Por último, es importante tener en cuenta que la Agencia Tributaria puede solicitar documentos o información adicionales para verificar la correcta solicitud de la bonificación de reestructuración. Si se acepta la solicitud, la ventaja fiscal se concederá en forma de crédito fiscal durante los años siguientes
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En conclusión, la bonificación por renovación representa una importante ventaja fiscal para todos los contribuyentes que tengan la intención de llevar a cabo reformas en sus viviendas o en las propiedades de su propiedad. Gracias a este incentivo, es posible obtener una devolución fiscal del 50% de los gastos incurridos, hasta un máximo de 96.000 euros por unidad inmobiliaria
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Sin embargo, para solicitar la bonificación de renovación, es necesario cumplir con ciertas condiciones y requisitos establecidos por la ley, incluida la conformidad de las intervenciones con la normativa técnica y urbanística vigente y la presentación de la documentación relativa a los gastos incurridos.
En cualquier caso, es importante tener en cuenta que la bonificación por renovación representa solo una de las posibles exenciones fiscales que prevé la ley para la mejora energética y la seguridad de los edificios. Por eso, antes de iniciar cualquier tipo de intervención en un edificio, siempre es recomendable contactar con un profesional del sector para que evalúe las diferentes opciones disponibles y elija la que mejor se adapte a sus necesidades.
